Joven la decisión es tuya
Cuando Dios te llama, no te conviene, ni deberías, ni necesitas responder, si tu respuesta ha de ser dada con rabia, con miedo, o con displicencia.
Cuando Dios te llama, es mejor que no respondas, si tu respuesta será dada entre rezongos, quejas y rechinar de dientes.
Cuando Dios te llama, es mejor que no respondas, si
todo lo que sabes decir es:...pero..., sin embargo..., mientras que... o lo haces sin condiciones, o es mejor que no respondas!
Si El dice que lo es todo, ¡Lo es todo!
Si El dice que es renuncia, ¡Es renuncia!
Si El dice que es martirio, ¡Es martirio!
No introduzcas tu versión más blanda, si no su llamado deja de ser de él, para convertirse en un deseo tuyo.
¡Pero la decisión es tuya!
Cuando Dios te llama, es ¡Si o No!
Y si tu Si no es con completa disponibilidad y generosidad, ¡será como si hubieses dicho que no!
¡Con todo, la decisión es tuya!
Dios sólo no quiere que aceptes con rabia...
¡Pero la decisión es tuya! ¡Solamente tuya...!
Cuando no dices ni Sí, ni No, cuando respondes que "Quizás... tal vez..., quién sabe. . . “EN REALIDAD, ESTAS DICIENDO QUE NO.
Publicar un comentario