Soy de Jesús ¡Ya hice mi elección...

Afianzados en esta esperanza nos dirigimos, ante ustedes  jóvenes para que en la elección de su futuro acojan  el proyecto que Dios tiene sobre ustedes: sólo serán felices y plenamente realizados si se disponen  a realizar el plan del Creador sobre la criatura. ¡Cuánto desearíamos que este escrito fuese como una carta dirigida a cada uno de ustedes, en la que pudiesen sentir, con la ayuda de Dios, la solicitud de la madre-Iglesia para cada uno de sus hijos, esa solicitud tan particular que una madre tiene para sus hijos más pequeños. Una carta en la que podrán  reconocer sus  problemas, la preguntas que anidan en su corazón joven y las respuestas que vienen de Aquél que es el amigo perennemente joven de vuestras almas, ¡el único que  puede decirles  la verdad! Sepan, queridos jóvenes, la Iglesia de Margarita sigue ansiosa sus  pasos y sus opciones. Y qué hermoso sería si esta carta suscitase en ustedes  alguna respuesta, para un diálogo continúo con Dios y dar una respuesta...