DIOS LLAMA A JOVEN CON PARÁLISIS, A LA VIDA SACERDOTAL EN LA DIÓCESIS DE MARGARITA.
pvmargarita 08-11-17
Me llamo Samuel Rivas, tengo 18 años de edad vivo en La Asunción y pertenezco a la Parroquia Nuestra Señora de La Asunción.
Quiero Narrarles un poco de la Historia de mi vida ya que está ligada de alguna u otra manera con mi intensión de realizar este proceso.
Yo nací el 6 de Agosto de 1999, de parto gemelo, con tan solo 27 semanas de gestación en el vientre de mi madre(6 meses) razón por la cual no tuve una formación normal y correcta como los demás niños además de que sufrí una parálisis cerebral que afecto el lado derecho de mi cuerpo específicamente en la parte motora razón que llevo a que molestaran mucho durante mi niñez y mi adolescencia en el colegio por aquellos a quienes les decía "compañeros" pero que me hacían mucho Bullying razón que me llevara a perder en cierto modo el rumbo de mi vida, lo cual derivo en la toma de decisiones incorrectas que derivaron en momentos que hoy no quiero recordar.
Como ya mencione este maltrato que yo sufrí me llevo a tomar muchas malas decisiones y pensar que mi vida no tenía ningún sentido, hasta que un día a través del impulso de mi hermana Andrea y de algunos amigos me uní a la Pastoral Juvenil y me acerque mucho más a la iglesia y desde allí mi vida empezó a cambiar, fue así como me di cuenta que el centro de mi vida es Dios y que por medio de, el todo se puede lograr, que no hay porque estar tristes o amargados si lo tenemos a él.
Actualmente estudio soy Ministro del altar (monaguillo) en el Sagrario Catedral Nuestra Señora de la Asunción y quiero destacar que no fue una decisión que tome de la noche a la mañana sino que me llevo tiempo de pensar hasta que finalmente lo acepte, Destacando a una Persona que sin duda ha influido mucho tanto en mi vida personal como en mi vida religiosa y es el Padre Andrés Villarroel a quien le tengo gran admiración, Respeto y estima! Pues él fue quien dio origen a nuestra Pastoral Juvenil y quien me motivó a servirle a Dios como ministro en el altar. Pero más allá de eso lo admiro y lo respeto porque él me ha ayudado mucho acrecer como persona, como ser humano y a tener mucho más presente a Nuestro Dios.
Quiero realizar este proceso Vocacional porque ciento que Dios me llama y me ayudará a crecer mucho más, tanto en mi vida personal, como espiritual. Independientemente de cuál sea el resultado final de esta experiencia, Dios me llama a servirle en mi Iglesia Católica, el cual eso busco “Crecer” como ser humano y que mi fe no solo se mantenga intacta sino que se incremente… Y Bueno quiero agradecer esta oportunidad a la Pastoral Vocacional de la Diócesis de Margarita y… “¡Que se Cumpla la Voluntad de Dios y no La mía!”
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